Hacer

078 Jesús se comunicó, enseñó, ilustro en varias ocasiones a los creyentes a través de parábolas; una parábola es la narración de algo bien conocido terrenalmente con el fin de explicar una verdad espiritual perteneciente al reino de Dios; en esta parábola Jesús trata de explicar que su palabra está dificultada, vedada, como obstaculizada para aquel que tiene el corazón engordado, robustecido, entorpecido ya sea por la incredulidad, como por la vanidad de pretender saberlo todo ya, o por el pecado que habita comodante en el corazón del hombre**.
079 Cuando hablo del pecado que habita cómodamente en el corazón del hombre es debido a que muchos han domesticado al pecado con la pretensión de justificarse, ante los hombres y ante Dios porque practican cosas que pertenecen a las tinieblas, olvidándose que Dios es Santo y sin santidad nadie verá al Señor y todo aquel que practica el pecado no es de Dios.
080 Lamentablemente dentro del pueblo de Dios hay hombres y mujeres que viendo no ven, y que oyendo no oyen por el simple hecho que no le prestan la debida valoración a la palabra de Dios, existe una falta de interés o receptividad hacia la misma, hay corazones endurecidos, prejuiciosos, o simplemente una falta de búsqueda de la espiritualidad en medio de las distracciones del mundo o de los deseos carnales que batallan directamente contra el Espíritu.
081 La falta de interés o receptividad hacia el mensaje de Dios puede ser, en muchas ocasiones, el resultado de corazones endurecidos, prejuicios o simplemente falta de valoración por lo espiritual en medio de las distracciones del mundo.
082 Sin embargo, también es cierto que la palabra de Dios tiene el poder de transformar incluso los corazones más cerrados. En la Biblia, hay muchos ejemplos de personas que inicialmente rechazaban o no entendían el mensaje, pero que con el tiempo fueron tocadas y cambiadas por su poder y verdad. ¿Crees que hay maneras de acercar el
083 En muchas ocasiones estas situaciones lamentables reflejan con claridad esta actitud de escuchar sin realmente comprender o interiorizar el mensaje, pero, por otro lado, vemos que el verdadero poder de la palabra de Dios, transformando corazones incrédulos, duros o cerrados, porque en las congregaciones siempre hay un número importante de ejemplos de personas que en un principio rechazaban o no entendían el mensaje, pero con el paso del tiempo fueron, tocadas, cambiadas, transformadas por el poder de Dios .
084 Pero nuestro enfoque hoy está en aquellos que reciben la palabra de Dios, la aceptan, pero viven como si no le tuvieran aprecio, valoración, interés al mensaje de Dios, no se interesan, ni reciben el mensaje de Dios, principalmente con aquel que han etiquetado como "duro".
085 En cierta ocasión muchos de sus discípulos consideraron al mensaje dado por Jesús como palabras "duras", y comenzaron a chismear, a murmurar de la palabra, Jesús percibe la situación, sus propios discípulos están siendo contaminados, Jesús los encara diciéndoles: la palabra que les he dicho les ofende, pero, quiero decirles algo; "el espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida" (Juan 6:63)
086 Muchos de sus discípulos abandonaron a Jesús, se volvieron atrás, el abandono de las personas del grupo se ve que estaba molestando internamente a los apóstoles, por lo cual le Dijo entonces Jesús encarando a los doce: ¿Queréis acaso iros también vosotros? Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna. (Juan 6.67-68)
087 Es un hecho que en todos los que amamos a Dios y hemos creído en Jesucristo nuestro Señor y salvador, aspiramos de todo corazón alcanzar la buena pretensión de vivir, de disfrutar, de gozarnos de la presencia de Dios en nuestras vidas, vivir en la plenitud del Espíritu, con el fin, con el propósito, de alcanzar el desafío implícito, sobreentendido, de reflejar a Cristo a través de nuestras vidas.
088 La palabra de Dios nos ha sido revelada entre otras cosas para que podamos entender las cosas esenciales y las hermosas verdades de la fe, así como los deseos de Dios para con nosotros, que nuestras vidas sean guiadas no solo hacia la santidad sino hacia una vida transformada integralmente, y así llegar a recibir la corona de vida en la patria celestial; para que resistamos al pecado, para que sigamos la verdad en amor a fin de que podamos ser hombres y mujeres de Dios perfectos, enteramente preparados para toda buena obra. (2 Timoteo 3:17)
089 Sin embargo, las escrituras tienen fuertes advertencia sobre el pecado voluntario luego de que la verdad ha sido revelada, cuando se sabe lo que está mal ante los ojos de Dios e igual se hace, cuando sabemos lo que tenemos que hacer, pero no lo hacemos, el apóstol nos dice: nos advierte de la siguiente manera: si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados, sino una horrenda expectación de juicio.
Adquirir el conocimiento de la verdad a través de la revelación de las sagradas escrituras nos tiene que llamar a la responsabilidad no solo de evitar el mal, sino resistirlo y de esforzarnos por cumplir el bien que sabemos que debemos de hacer como está escrito, "el que sabe hacer lo bueno y no lo hace, comete pecado"
El que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere irremisiblemente. ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia? (Hebreos 10:28- 29) es un hecho que las escrituras están poniendo un énfasis de la importancia de actuar sobre lo que sabemos y conocemos que es correcto a los ojos de nuestro Dios.
Quizás estas palabras nos resulten algo duras, pero recordemos que Dios siempre ha sido fiel a su palabra que lo único que nos ayuda y nos da certeza de victoria es la gracia de Dios por medio de la fe puesta en nuestro Señor y salvador Jesucristo, por lo tanto, debemos cuidar esta salvación, todo aquel que ha conocido a Cristo y lo ha aceptado como su Señor y Salvador debe de esforzarse en vivir conforme a sus demandas porque en caso de no hacerlo y permanecer en el pecado es algo semejante a las olas del mar o a las hojas otoñales que no tienen un dirección definida que van de un lado al otro conforme el viento sopla, es como si estar en dos pensamientos a la vez, cosa que no agrada a Dios.
Si Jehová es nuestro Dios sigámosle a él, debemos seguirle a él en santidad porque sin santidad nadie verá al Señor, debemos de esforzarnos por vivir en el calor, en el fuego de Dios, porque la peor, porque la más infame, la más siniestra de todas las vidas es vivir en la tibieza espiritual, la tibieza espiritual no solo nos aleja de Dios, sino que nos asemeja a un vómito, a una verdadera aversión a una abominación a los ojos de Dios en este presente siglo. "Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca" (Apocalipsis 3:15-16)
El estar experimentando, gozando de la gracia y el amor infinito de Dios en cada una de nuestras vidas, el disfrutar de sus bondades en este mundo presente y llenos de esperanzas hacia nuestra patria celestial, debemos esforzarnos por permanecer en la verdad como iglesia del Dios viviente, es indiscutible la grandeza y el misterio de la verdad (1 Timoteo 3:16)
El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre. Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala. (Eclesiastes12:13-14) los que van y vienen con el pecado ellos mismos clavan a Jesús otra vez en la cruz y lo exponen a la vergüenza pública. (Hebreos 6:6)
Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido. Profesando ser sabios, se hicieron necios (Romanos 1:21-22) Por lo cual, como dice el Espíritu Santo: Si oyereis hoy su voz, No endurezcáis vuestros corazones, Como en la provocación, en el día de la tentación en el desierto, (Hebreos 3:7-8)
Abundantes bendiciones en Cristo para tu vida y tu familia, en todo lo que puedas y dependa de ti "apártate del mal, y haz el bien; busca la paz, y síguela." (Salmo 34:14) Atte. Myrp
Abundantes bendiciones en Cristo para tu vida y tu familia, en todo lo que puedas y dependa de ti "apártate del mal, y haz el bien; busca la paz, y síguela." (Salmo 34:14) Atte. Myrp
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